La Contraloría General advirtió a la Municipalidad Metropolitana de Lima la existencia de riesgos que podrían afectar la operación del puente Dueñas.

Lima, 01 Marzo 2017, (ANDINA).- La Contraloría General advirtió a la Municipalidad Metropolitana de Lima la existencia de riesgos que podrían afectar la operación del puente Dueñas, debido a deficiencias en las obras de prevención ejecutadas por la comuna para contrarrestar los efectos del creciente caudal del rio Rímac.

Una inspección de la Contraloría realizada el 27 de febrero último y de la recopilación de información reveló que los trabajos preventivos reportados por la comuna, a través de la Empresa Municipal Administradora de Peajes (EMAPE), entre noviembre y diciembre del 2016, consistentes en la colocación de concreto ciclópeo, colocación de rocas y limpieza del cauce en zonas aguas arriba y aguas abajo, “no habrían cumplido los objetivos previstos”.

A raíz del incremento del caudal por la temporada de lluvias, el río derribó paños del muro de contención en la margen izquierda, ante lo cual la municipalidad provincial colocó rocas, que en parte han caído al cauce.

Esta situación ha reducido el cauce del río con el riesgo de afectar las operaciones y dañar al puente; por lo que se estima que los trabajos desarrollados por Emape no estarían cumpliendo con los objetivos previstos y que más bien originarían mayores costos para atender sus requerimientos.

Asimismo, de la acumulación de materiales de trabajos de prevención y del talud circundante deslizado al río, incluyendo rocas, han originado un embalse de agua, bajo el puente, obligando a que el torrente se dirija con mayor fuerza hacia la margen derecha, ocasionando el daño a la vía vehicular adyacente y a los servicios higiénicos, con el riesgo de afectar totalmente a las instalaciones del polideportivo ubicado en esa zona.

Cabe mencionar que las estructuras del puente Dueñas son muy antiguas y en los últimos años soportan una alta carga de tráfico liviano y pesado, ya que desde hace meses se utiliza como desvío luego del colapso del puente Bella Unión en el año 2013, cuya obra de construcción continúa.

Respecto a la infraestructura afectada cerca al puente Dueñas (polideportivo y pista) construida por la Municipalidad Distrital de San Martín de Porres, la Contraloría verificó que se ubica en una zona crítica y de alto riesgo, donde se angosta el cauce del río Rímac, lo que compromete su estabilidad en el tiempo.