Además de la exposición al contagio de covid-19, los riesgos son múltiples

Lima, 29 Diciembre 2020, (ANDINA).- Los cuidados para prevenir un posible contagio del coronavirus deben mantenerse también al momento de pensar en los rituales que se acostumbran desarrollar en casa a fin de recibir el Año Nuevo.

Para el biólogo Jorge Cabrera, del Instituto Nacional de Salud (INS) del Ministerio de Salud (Minsa), lo mejor sería abstenerse de realizar estas prácticas en su totalidad para evitar cualquier peligro y no arriesgarnos a pasar el Año Nuevo en un hospital.

En todo caso, si se insiste en ponerlas en práctica, aconsejó tener en cuenta tres detalles importantes: comprar producto con etiquetas que describan de manera clara qué es lo que contiene; el Registro Sanitario (RS) autorizado por la Dirección General de Salud Ambiental (Digesa) y la fecha de caducidad o vencimiento.

“No podemos pasar por alto estos aspectos. No podemos adquirir productos adulterados o que incumplan las normas sanitarias. Entonces, si somos observadores, vamos a adquirir un buen producto”, afirmó el especialista en Andina al Día.

El experto pidió a la población no usar agua de siete iglesias, de cananga o de siete espíritus para los baños de florecimiento, pues contienen solventes como kerosene, alcohol metílico, entre otros insumos que podrían ser peligrosos para la salud.

Tampoco es conveniente recibir las famosas ‘sopladas’ con agua de flores, ya que podrían mezclarse con las gotículas respiratorias de quien ofrece esos baños. Advirtió que las personas a cargo de estos rituales podrían tener el covid-19 y contagiar a sus clientes.

Por otro lado, el biólogo del INS consideró importante que las flores o los pétalos que se usen estén frescos y no empaquetados en plástico porque, sumado al calor de la estación, podrían deteriorarse muy rápidamente. En caso de estar marchitas podría haber presencia hongos y bacterias que pueden crearnos un mal momento.

Finalmente, se debe evitar en todo momento que los niños, sin el debido cuidado, formen parte de estas ceremonias ya que podría suceder algún accidente con ellos.

“Nosotros somos muy respetuosos de las costumbres y las tradiciones. Vivimos en un país pluricultural, de muchas etnias y comunidades, pero también nuestro deber como ente de salud es advertir a la población sobre los riesgos que pueden tener estos productos que pueden adquirirse de manera informal”, puntualizó Cabrera.