La Contraloría advirtió que el proyecto de reubicación del botadero del distrito tumbesino de Corrales pone en riesgo la calidad ambiental de la zona.
Lima, 24 Septiembre 2019, (ANDINA).- La Contraloría General de la República advirtió que el proyecto de reubicación del botadero del distrito tumbesino de Corrales, valorizado en S/ 758,941.76, pone en riesgo la calidad ambiental de la zona al degradar los suelos y también la salud de las personas.
Tal iniciativa tiene como finalidad reubicar el botadero de emergencia que estaba antes en la quebrada Corrales hacia el botadero municipal del distrito, para lo cual la Municipalidad Distrital de Corrales otorgó la buena pro del servicio a un operador privado. De esta manera, se pretende beneficiar a los 24,085 habitantes del distrito.
Según el Informe de Orientación de Oficio N° 1853-2019-CG/GRTB-SOO, en la visita realizada a la zona de disposición final de los residuos sólidos en Corrales, se constató que no se han realizado los trabajos de compactación y posterior tapado con tierra, dejando los residuos al aire libre. Además, se observaron residuos sólidos fuera de las pozas debido a que la entidad tiene un déficit de maquinaria para realizar dicha labor.
También se verificó que en las zonas aledañas al botadero no existe un letrero de identificación (panel) ni cerco perimétrico de delimitación y tampoco una caseta de guardianía y control para el registro de entrada y salida de vehículos o personas de las instalaciones del botadero.
Entonces, estas carencias pueden ocasionar que las personas de otros distritos aprovechen las pozas para arrojar sus residuos sólidos sin haber coordinado con la entidad, generando una mayor cantidad de desechos en el distrito.
Lo expuesto genera el riesgo de que los depósitos de basura cubran áreas fuera de su entorno, al no existir una delimitación que se suma a la falta de supervisión y diligencia respectiva, debido al mayor ingreso de residuos sólidos de los centros poblados cercanos, generando más contaminación del medio ambiente y afectando la salud de las personas.
Por otro lado, el Informe de Orientación de Oficio señala que los documentos del “Acta de entrega de terreno de 5 de abril de 2019” y el “Acta de Recepción del servicio de 22 de mayo de 2019” se encuentran firmados por una profesional de ingeniería cuya identidad es diferente a la que acreditó el consorcio ganador del servicio, a lo que se adiciona que no existen documentos que acrediten la experiencia requerida para dicha profesional.