La Contraloría alertó sobre la existencia de riesgos en la obra del by-pass de la avenida 28 de Julio, a cargo de la Municipalidad Metropolitana de Lima.
Lima, 18 Mayo 2017, (ANDINA).- La Contraloría General de la República alertó sobre la existencia de riesgos en la obra del by-pass de la avenida 28 de Julio, a cargo de la Municipalidad Metropolitana de Lima, que podrían afectar la calidad y vida útil de dicha estructura, la prestación del adecuado servicio y la integridad física de los usuarios y peatones.
El Órgano de Control Superior identificó que en el pavimento del paso inferior y en las vías auxiliares de las avenidas Arequipa, República de Chile, 28 de Julio y Garcilaso de la Vega existen deterioros prematuros en las superficies como desgaste de la capa asfáltica, fisuras longitudinales y transversales, ahuellamiento, desplazamiento de la capa asfáltica y baches, que requieren una solución técnica oportuna y definitiva.
Asimismo, detectó demoras en la subsanación de las deficiencias constructivas de las veredas y sardineles que no permiten a los peatones el uso seguro de la obra.
La Contraloría identificó además que la puesta en servicio de la obra de manera incompleta genera que las personas que se desplazan por la avenida Garcilaso de la Vega utilicen la vereda de mantenimiento del by-pass para cruzar hacia la avenida Arequipa, exponiéndolos al riesgo de accidentes.
Estas observaciones fueron comunicadas a la Municipalidad de Lima a fines del mes de abril para que tome las acciones correctivas necesarias.
Puente Bella Unión
De otro lado, la Contraloría informó que el municipio de Lima no ha tomado acciones para atender las alertas remitidas, producto del control simultáneo, respecto a la ejecución del nuevo Puente Bella Unión formuladas en marzo de 2017, en relación a que la obra se ejecuta de manera distinta a lo aprobado en el Máster Plan (Plan Maestro) y sin contar con el estudio definitivo de ingeniería aprobado.
De acuerdo al Máster Plan, el nuevo puente debía ser una estructura atirantada, pero se advirtió que la construcción o solución técnica que se aplica es una estructura apoyada, sin pilar central.
Además, se alertó del estrechamiento del cauce del Río Rímac para la construcción del puente lo que ocasiona la socavación del enrocado de protección y el riesgo de afectar la cimentación de los estribos de la estructura.
Las alertas señaladas fueron informadas a la Municipalidad Metropolitana de Lima el 1 de marzo y el 28 de abril (by-pass 28 de Julio) y el 11 de mayo de este año (Puente Bella Unión).
A finales de abril de este año, la Municipalidad de Lima informó que el nuevo Puente Bella Unión, que colapsó en el 2013, será entregado en julio próximo.